Lucius está aquí para enseñarte sobre la luz y el papel que desempeña en el crecimiento de las plantas. Las plantas son como pequeñas fábricas verdes que necesitan luz solar para vivir y producir alimento. Las plantas no pueden fabricar su propio alimento sin luz, un proceso conocido como fotosíntesis. Este es un proceso muy vital que permite a las plantas absorber la luz solar y transformarla en energía. Pero no toda la luz es igual. La luz consiste en muchos colores, y cada color existe a una longitud diferente llamada longitud de onda. Para los ojos humanos, los colores que podemos ver son rojo, naranja, amarillo, verde, azul, violeta e índigo. Pero para las plantas, hay muchos colores que son clave para su crecimiento y bienestar.
Las plantas requieren cuatro colores principales de luz para un crecimiento fuerte: rojo, azul, verde y rojo lejano. Todos estos colores ayudan a las plantas de varias maneras. La luz roja es la luz con la longitud de onda más larga (y, por lo tanto, menor energía), y atraviesa bien la atmósfera, lo que la hace muy útil para el crecimiento y floración de las plantas. La luz azul tiene una longitud de onda corta; es una parte importante que crea raíces fuertes. Esto es importante porque las raíces fuertes permiten que las plantas absorban agua y nutrientes del suelo. La luz verde es algo diferente, ya que las plantas no la utilizan mucho. En cambio, la reflejan, lo que es por lo que muchas plantas parecen verdes. Pero aunque sea un papel pequeño, sigue siendo importante, por lo que la luz verde aún importa en el contexto de la fotosíntesis. La luz roja lejana, con las longitudes de onda más cortas, permite que las plantas respondan a la luz en su entorno.
La luz azul y roja es super importante para el crecimiento deficiente de las plantas. La luz roja es particularmente beneficiosa para las plantas en las etapas de crecimiento y floración. Aumenta la producción de clorofila, el pigmento verde en las plantas que les permite aprovechar la luz solar para crear alimento. En ausencia de suficiente luz roja, las plantas pueden crecer débiles y pequeñas, una característica que no queremos para nuestras plantas. La luz azul también importa porque contribuye al desarrollo de raíces fuertes y saludables. La falta de luz azul puede hacer que las plantas tengan tallos débiles y delgados y raíces pequeñas que requieren mucha energía para absorber agua y nutrientes del suelo. Esto hace que sea difícil para ellas sobrevivir.
Varias formas de luz pueden alterar múltiples aspectos del crecimiento de las plantas. Al aprender cómo funcionan estos diferentes tipos de iluminación, podemos mejorar la salud de las plantas en nuestros jardines o hogares. La luz roja, por ejemplo, fomenta la floración y el crecimiento rápido de las plantas porque aumenta la producción de sustancias importantes como la clorofila. Muchos de nosotros sabemos que la luz azul también actúa para regular el crecimiento de las plantas y su fortaleza. La luz verde, aunque es reflejada por las plantas, aún contribuye a la fotosíntesis y ayuda en el proceso de intercambio de gases que las plantas necesitan para la respiración. La luz infrarroja también ayuda a las plantas a adaptarse a condiciones de luz variables. Aprender cómo los diferentes tipos de luz impactan el crecimiento de las plantas puede, a su vez, ayudarnos a nosotros a cultivar plantas mejores y más fuertes.
La fotosíntesis es un proceso en el que la luz verde es un contribuyente importante, aunque las plantas no utilicen demasiado la luz verde. Las plantas verdes producen su alimento mediante un proceso llamado fotosíntesis. Absorben la luz solar, dióxido de carbono del aire y agua del suelo para hacer glucosa, un tipo de azúcar que les proporciona energía, y oxígeno, que liberan al aire. La clorofila es la razón por la que las plantas son verdes, ya que absorbe luz azul y roja, reflejando la verde, lo que le da su color verde. La luz natural también ayuda a regular el intercambio de gases a través de las aperturas de los estomas en las hojas, controlando el flujo de gases dentro y fuera de la planta, lo cual es vital para su supervivencia y bienestar.